La marca norteamericana de Stellantis anunció que fue una de las pruebas de manejo más grandes y exigentes jamás realizadas en el país vecino. Asimismo, tuvo la certificación de la Confederación Brasileña de Automovilismo (CBA).

Cómo fue la prueba con la Rampage

El ensayo fue realizado en el Circuito Panamericano del estado de San Pablo, donde cuatro unidades de la nueva camioneta con estructura monocasco circularon conjuntamente 24 horas, 1 minuto, 22 segundos y 507 milésimas.

La “chata” que más anduvo alcanzó los 1.850 kilómetros y entre todas registraron más de 5 mil km, un recorrido que es el equivalente a seis meses de uso. Además, dieron hasta 546 vueltas al circuito, mientras que el mejor promedio de vuelta fue de 95 km/h.

Las camionetas utilizadas no fueron modificadas; son como las que Ram comercializa en los concesionarios. Sólo se hicieron cambios para garantizar la seguridad (no por desgaste) debido a la exigencia de neumáticos y frenos: se reemplazaron cuatro pares de cubiertas delanteras, dos pares de neumáticos traseros y tres juegos de pastillas de frenos.

Para realizar la iniciativa, la marca contó con la colaboración de más de 200 personas entre pilotos, técnicos, equipos de mantenimiento y profesionales de logística. También fueron invitados socios de Ram y la prensa de Brasil.

La versión elegida para la prueba

La pick up más adecuada para este tipo de pruebas en asfalto es la Rampage R/T, la versión deportiva de la gama: brinda una aceleración de 0 a 100 km/h resuelta en 6,9 segundos y una velocidad máxima de 220 km/h.

Las mencionadas prestaciones son posibles gracias al motor naftero 2.0 turbo con 272 caballos de potencia y 400 Nm de torque asociado a la caja automática con nueve velocidades y la tracción en las cuatro ruedas. Además, incluye suspensión independiente trasera y frenos con discos en las cuatro ruedas.