Poco a poco son más los usuarios que han decidido por realizar cambios estructurales en sus vehículos y que a largo plazo se ha podido generar un nuevo modelo urbano de movilidad, potenciando la ecología y la sostenibilidad. Con la entrada en vigor desde el pasado 1 de enero de 2023 de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en esos municipios con más de 50.000 habitantes, hicieron que en muchos casos los usuarios hayan tenido que potenciar la usabilidad de las etiquetas ECO y sin emisiones que permiten que la población pueda circular sin grandes complicaciones.

Ahora, ante esta situación, son distintos los caminos viables que pueden hacerle frente para garantizar su usabilidad. Una de las opciones es adquirir un vehículo que ya cuente con estos distintos o bien, realizar una conversión que garantiza la usabilidad de estos modelos con una etiqueta ECO. Los datos no engañan y el 2022 se procedió la transición de un total de 3.512 coches de gasolina. Para ello, realizaron un cambio completo dejando atrás la gasolina al uso y empezó a utilizar un tipo de gas licuado de petróleo, más conocido como GLP. 

Los datos de la Asociación de Transformadores de Vehículos, más conocida como ASTRAVE, se produjo un incremento en el 2022 de un 36% en España. De este modo, dejaron atrás los modelos que cuentan con una etiqueta C, que no permite la circulación de estos coches por esas ciudades, pasando a tener la etiqueta ECO, una vez realizada la conversión por completo.

Una gran dependencia

Según ha indicado la ASTRAVE, los modelos de las marcas Toyota y Dacia, fueron los más transformados en 2022. Esto se debe especialmente a que una gran cantidad de los modelos que se cambiaron eran especialmente taxistas, que debían implementar algunas alternativas más sostenibles y eficientes. Si estas evaluando cambiar tu modelo y realizar esta transición, no te olvides de que deberás tener el coche matriculado en 2006 y cumplir con la norma Euro 4 como mínimo. No hay que olvidarse de que este tipo de transición tiene un coste un tanto elevado, entre los 1.500 y los 2.500 euros, aunque garantizarás su circulación sin problemas.