El Renault Espace surgió en la década del 80 y siempre se destacó por su carrocería monovolumen y su capacidad interior. Con la nueva generación, la marca del rombo revolucionó la historia del modelo transformándolo en un SUV, el segmento de moda.
Si el diseño del nuevo producto te parece conocido, es porque es una alternativa extendida del Austral, el SUV del segmento C que ya está disponible en Europa. Ambos comparten el sector frontal y el diseño del interior, pero el Espace suma espacio y asientos.
Diseño exterior con estilo conocido
Al igual que el Austral, cuenta con la plataforma modular CMF-CD y una zona delantera en la que se destaca el estilo actual de la marca francesa, incluyendo las ópticas con forma de C y luces LED diurnas que se extienden al paragolpes.
En los sectores laterales hereda algunos de los trazos del SUV más pequeño, pero suma nuevas líneas en el sector trasero, que posee una ventanilla de mayor tamaño. Además, tiene llantas de hasta 20 pulgadas.
Con 4,72 metros de largo, el nuevo Espace es unos 21 centímetros más grande que el Austral y 14 cm más pequeño que el modelo anterior, que además es 215 kilogramos más pesado.
Interior para familias numerosas
Al igual que el modelo precedente, el nuevo SUV posee una configuración con cinco o siete plazas gracias a la tercera fila de asientos. Se combinan con un baúl con 159 litros cuando se utilizan todos los asientos y con hasta 777 l con cinco plazas.
También comparte con el Austral el puesto de conducción con una doble pantalla; tiene una pieza horizontal de 12,3 pulgadas destinada al tablero de instrumentos y otra táctil con forma vertical y 12″ para el sistema multimedia y otras funciones.
El equipamiento además ofrece proyector de datos en el parabrisas, selector de modos de conducción y ayudas a la conducción como el asistente de autopista y tránsito, que brinda una conducción autónoma de nivel 2 gracias a la combinación de sistemas como el control de crucero adaptativo y el asistente de mantenimiento de carril.
Mecánica electrificada
La motorización es la misma del Austral. Se trata de un sistema híbrido que incluye un motor naftero con tres cilindros y turbo que genera 130 caballos junto con un motor eléctrico principal que adiciona 70 CV y otro motor eléctrico -de arranque- con 25 CV.
La combinación de los propulsores genera una potencia total de 200 caballos y un consumo mixto de 4,6 litros cada 100 kilómetros recorridos. Además, incluye un modo de conducción eléctrica, tracción delantera y un sistema de dirección en las cuatro ruedas.